El clásico corazoncito en cuyo interior encerrábamos las iniciales de dos enamorados y que todos hemos pintado en el pupitre de la escuela ha salido del aula y se ha renovado: ahora la moda es dibujarlo en un candado y atar el candado a algo visible para que todo el mundo sea partícipe de ese amor que no se puede separar.
El Sevilla el lugar escogido para esta nueva tradición es el puente de Triana, el más clásico y bonito de cuantos cruzan el Guadalquivir que ahora más bien asemeja al escaparate de una ferretería. Las preciosas formas de su hierro forjado se afean por una sucesión de candados de todas las formas y colores, y las iniciales se complementan con frases como "nuestro amor es lo más grande" y otras perlas por el estilo. Pero sin duda lo peor de esta horterada es que la tradición dictamina que la llave del candado debe tirarse al río para que nunca nadie pueda reabrir el candado y deshacer el amor. Toma ya, en vez de una rosa me compro un candado y encima contamino el Guadalquivir, por si ya tenían poco los peces de tres ojos que nadan en sus aguas.
Lo más curioso del caso es que toda esta ola de chabacanería viene del gesto de una pareja en la novela de Federico Moccia A 3 metros sobre el cielo, donde los protagonistas efectivamente daban fe de su amor en Roma encadenando un candado a una farola del Puente Milvio y lanzaban la llave al Tíber. En la era del platanismo, donde todo se globaliza a una velocidad de vértigo (la novela se publicó en 2008), miles de personas copiaron el gesto y la pobre farola apareció con un enjambre de candados (ver foto) que, debido al peso generado, al poco tiempo cedió y ¡se cayó al río!
Los candados del puente de Triana ya han sido retirados alguna vez por el ayuntamiento, con los consecuentes costes que ello genera, pero aquellos se reproducen más rápido que los Gremlins cuando se mojaban. La masa social con su bandera de lo hortera está imponiendo su dictámen, y ya no sé si llorar o poner mejor una ferretería en la esquina del puente.
Lo hortera por bandera
lunes, 10 de enero de 2011
Publicado por Lince, viajero de culo inquieto en 16:54
Etiquetas: 007.Costumbres, 100.España, 110.Andalucía, 113.Sevilla
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5 comentarios:
Un día de éstos me mudo a un planeta en el que no haya tanto subnormal suelto (si es que existe... xD )
¡¡¡los odio!!!
joder! eso ya lo pense yo hace mas de un año, cuando vi algun candado ya en el puente, pero ahora no me lo quiero ni imaginar!!!
es una horterada y ademas es feisimo!!!!!!!!!!!!!
Ferretería, ferretería!!! y vendemos los candados con los corazones ya dibujados, y los megaplatanos estos seguro que caen como moscas.
joder os voy a enviar una foto por correo para que veáis un verdadero abuso candadil!!!
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